Si buscamos fomentar progresivamente nuestro bronceado, podemos ayudarnos con la alimentación, incrementando el consumo de ciertos alimentos que nos ayudarán a conseguir un bonito y saludable moreno y a mantenerlo por más tiempo.
Se trata de los alimentos que tienen una pigmentación de color rojo o naranja, como por ejemplo: la zanahoria que es un clásico que todos conocen, pero también, las fresas, las cerezas, la sandia, los tomates, la papaya, el mango y las verduras del tipo de las espinacas, los calabacines (sin quitarles la piel), el brócoli, la lechuga, los pimientos rojos y verdes, la remolacha, etc. Todos ellos se pueden consumir en ensaladas o zumos, licuados y combinados con lima, naranja o limón, si queremos dar un toque refrescante o simplemente con un poco de agua.
Un buen zumo de una combinación al gusto de cualquiera de estos ingredientes será un magnífico activador del bronceado ¡además de un buen protector!